1. REPASA este esquema de la Literatura medieval que recogiste en tu cuaderno
2.- MOAXAJAS, AMOR CORTÉS (trovadores), CANTIGAS DE AMOR, CANCIONES DE ESCARNIO. Realiza en tu cuaderno un resumen del siguiente documento:
3.- Lírica amorosa de AMOR CORTÉS. LECTURA de los poemas 26 a 28 de la “Antología de la Lírica Amorosa”, editorial Vicens Vives
Antología lírica
4.- EL TEMA DE LA MUERTE EN LA EDAD MEDIA
Haz un resumen en tu cuaderno de las explicaciones siguientes
1) Hasta el siglo XIV la muerte fue un tema relativamente neutro en la literatura. Se enfocaba como un hecho natural, que causaba cierta incomodidad, pero sin especial dramatismo. En el caso de los guerreros, la muerte podía ser heroica.
2) La peste negra del siglo XIV, que diezmó la población europea, supuso un cambio en el enfoque de la muerte como tema literario. La muerte se vio como una fuerza trágica que daba al traste con la vida y las ambiciones humanas. Surgen con fuerza los siguientes enfoques:
2.1.- Aceptación de la muerte como aviso de la inconsistencia y vanidad de la vida terrenal. Renacen, de forma truculena, los tópicos literarios temporales, como el ubi sunt, la muerte igualadora, la rueda de la fortuna, la vita flumen, etc. en que se insiste en la inconsistencia de la vida humana y en la vanidad de las ambiciones. LA DANZA DE LA MUERTE es un buen ejemplo de esta tendencia.
MUERTE TRUCULENTA
2.2.- Necesidad de aprender a morir. Abundan los tratados que explican cómo se ha de morir para conjugar la vida terrena y la vida espiritual. En esta tendencia del bien morir se incluye las COPLAS A LA MUERTE DE SU PADRE, de Jorge Manrique
COPLAS A LA MUERTE…
2.3) Frente a estos enfoques, surge otro de disgusto y rebeldía ante la muerte, como muestran los siguientes fragmentos de EL LIBRO DE BUEN AMOR y de LA DANZA DE LA MUERTE
REBELDÍA ANTE LA MUERTE
Posiblemente has visto la película INTERESTELAR. El leitmotiv de la película es un poema de Dylan Thomas, poeta inglés del siglo XX: NO ENTRES DÓCIL EN ESTA BUENA NOCHE. Observa que el enfoque de la muerte de este poema es parecido al explicado en el punto 2.3.
No entres dócil en esa buena noche,
la vejez debería arder y enfurecerse al concluir el día;
enfurecerse, enfurecerse contra la muerte de la luz.
Aunque al llegar su fin los sabios sepan que la oscuridad es justa,
ya que sus palabras no desviaron el relámpago
no entran dóciles en esa buena noche.
Los hombres buenos, por ser los últimos, al lamentar lo mucho
que podrían haber brillado sus obras frágiles
se enfurecen, se enfurecen contra la muerte de la luz.
Los hombres salvajes, que capturaron al sol al vuelo y lo cantaron
y que aprenden, tarde, que entristecieron su camino
no entran dóciles en esa buena noche.
Los hombres graves, moribundos, que ven con ojos cegados
que los ojos ciegos podrían arder como meteoros y ser dichosos,
se enfurecen, se enfurecen contra la muerte de la luz.
Y tú, padre mío, desde tu altura triste,
maldice, bendíceme ahora con tus lágrimas feroces, te lo pido.
No entres dócil en esa buena noche.
Enfurécete, enfurécete contra la muerte de la luz.
Dylan Thomas
Traducción de Ben Clark